Norkys Batista, mi último personaje

No pocas personas de mi entorno profesional -y personal- me han preguntado por ese cambio de rumbo periodístico que he decidido. Porque, ciertamente, ha sido una decisión dejar a los artistas a un lado, por un momento, para dedicarme a analizar en el próximo programa de Luis Olavarrieta los hechos de violencia que sacuden el país. El nuevo espacio, de pronto estreno en Televen, tiene por nombre Rostros del Crimen, tan rotundo como la Venezuela que habitamos/padecemos.

La respuesta por natural puede resultar obvia: Soy periodista. Me gustan las noticias. Y hoy los artistas no son la noticia en Venezuela. O, al menos, no la principal. En Venezuela, el estrellato también ha sido expropiado. Ya no lo tienen ni los actores, ni lo cantantes, ni las modelos.

La espectacularidad, propia de los escenarios, se ha desplazado hacia otro ámbito, el de la criminalidad. Por eso, el líder de una banda es codiciado en su barrio, casi de la misma manera como lo fue por su carisma actoral Raúl Amundaray, durante aquel 1965 cuando personificó a Albertico Limonta en El Derecho de Nacer.

Los delincuentes de mi país son imitados por adolescentes que ven en quien delinque el estandar, ya no de aquel modo como ocurrió, en el esplendor musical de la década de 1980, con Guillermo Dávila y su romanticismo juvenil.Y buena parte de las niñas de Venezuela se disputan ahora no el autógrafo de Chino y Nacho sino el asiento trasero del motorizado más temido de la zona.

Esas podrían ser razones para no estar, por ahora, en la primera fila desde donde he disfrutado a mis actrices, entre ellas a Norkys Batista, quien un día como hoy, 30 de agosto, cumple 39 años de edad.  Felicidades para ella.

norkys actriz

Norkys se convirtió en mi última entrevista artística para Estampas, la revista del diario El Universal que el 16 de septiembre de 2008  me recibió como parte de sus periodistas y a la que he renunciado para darle otra orientación a mi oficio.

Luego de varios intentos por una cita con Norkys, aquel mujerón aceptó. Intimidante. Así resultó. Calculadamente provocadora. Norkys pertenece a la camada de actrices formadas por RCTV. También es una de aquellas reinas de belleza que en su crecimiento compartió pasillos con Amalia Pérez Díaz, Carlos Márquez y Rosario Prieto.

Norkys, la cumpleañera, tiene en sus registros la época gloriosa de la televisión venezolana, ese brillo que, pesa decirlo, comienza a difuminarse en la industria deprimida de estos tiempos.

La actriz saldrá en las páginas de Estampas, donde trabajé hasta el 15 de agosto de 2016, y en nuestra conversación la actriz no escondió sus vísceras. Lo esperaba. Habló de todo. De sus Orgasmos, la pieza con la que lleva siete años de teatro, expuso sus opiniones políticas, mencionó sus relaciones con algunos compañeros de trabajo, destacó a su hijo Sebastian y recordó como con la banda de Miss Nueva Esparta recibió el desplante, junto con el resto de participantes de Miss Venezuela 1999, del presidente Hugo Chávez de no ser recibida en Miraflores. Ahí se dio cuenta de que nacía otra Venezuela. Una Venezuela más directa, más violenta, de cortesía proscrita. Una Venezuela que ella, como muchos, reniega. Una Venezuela que ha hecho del suceso  el gran titular en los medios.

Gracias Norkys por tu cita. La pasé bien con tu risa grande.

 

 

 

Deja un comentario